Dejando mucho que pensar


Paseando por el campo como cualquier otro día,
pase cerca de un viejo árbol,
no pude dejar de mirarlo y ver lo que me estaba mostrando,
¿o me lo parecía a mi sin mas?
Cuanto más me alejaba para mirar,
más convencido estaba de que dos almas habitaban entre sus ramas,
es más dos almas que se adoraban y con sus besos lo demostraban,
serían las almas de dos viejos amantes que quedaron atrapados en aquel viejo arce que se amaron bajo sus ramas y entre ellas se quedaron prendidas.
Si pasas alguna vez por allí fíjate es inconfundible pues el beso es eterno y no viento que lo separe.
Seguí caminando aquel viejo arce se que do atrás dejando mucho que pensar mi mente seguía cavilando sobre aquel beso, sobre los amantes, sobre el viejo arce y lo que me quiso mostrar.   
Poema de Antonio Caro Escobar

Ver la entrada original

7 comentarios en “Dejando mucho que pensar”

  1. Tuvo que ser un beso muy apasionado por como quedaron sus ramas en un escorzo sin fin, como si hubiese sido el último beso desesperado ante el trágico destino… Bonito poema.

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario