
Amor de poeta
En este frío otoño sentados
al calor de la lumbre de una
buena chimenea,
Mientras el crepitar de las
llamas arrullan nuestras versos,
los poemas se recitan con voces
en dulce caramelo,
como si en vez de café,
se tomara el néctar
que los tenores toman
antes de cada concierto.
Y entre versos y versos los poemas
se desnudan en los labios de poetas y poetisas,
Las (sus) musas los escuchan,
arreboladas sus mejillas sonríen unas,
lagrimean otras,
con solo sentir el amor que expresan sus poetas.
