
El pasado mes de noviembre tuve la ocasión de conocer en persona a Fran Ignacio Mendoza, escritor y poeta. No solo estuve en la presentación de su último poemario, «Reflexiones y taquicardias», Sino que departimos mucho tiempo de conversación, he de reconocer que fue una tarde amena y muy gratificante, debatimos diversos temas , pero sobre todo de literatura, y lo que era para nosotros escribir poesía, si bien somos totalmente distintos a la hora de crear nuestros poemas, si que compartimos puntos de vista generales.
Durante la presentación el autor no recito algunos de sus poemas y nos mostró que su poesía es una poesía transgresora, evade la temática clásica, el romanticismo al uso, etc. Si bien crea y transmite una crítica social vista desde su ventana, utiliza una dialéctica sencilla, jugosa y versátil.
Como dice en uno de sus poemas, titulado «La casa abierta»
«Deja que entre el aire y refresque las estancias.
Deja que se ventile de sombras, de memorias silentes, álgidas que permanecen en nuestra ausencia».
Estos versos nos dejan entrever -desde mi punto de vista- que a veces tenemos que dejar la ventana de nuestra mente abierta y permitir que se refresquen nuestra mente y dejemos que las ideas vayan y vengan, que no se anquilosen los pensamientos y pesares del pasado que se hagan fuertes.
Reflexiones y taquicardias es uno de los muchos poemarios que tiene escrito Fran Ignacio Mendoza o «Fran Silvania» como también conocemos a este poeta y escritor.
