Miradas ocultas por velos de dudas,
reflejan las sombras de tu querer.
Muestran el dolor de mi ser,
sufriendo el desengaño de haberte amado.
Arrastras tus negros pesares por por doquier,
dejando tras de ti una marca zigzagueante,
por tu lengua sibilina.
como una víbora en la tierra polvorienta.
Mientras tratas a los demás como
debieran hacerlo contigo.
Y yo dócil y leal cuan cual can,
sigo enamorado suspirando por ese amor
que veo reflejado en el fondo de tus ojos.
Por ese ardor que me mostraste cuando
el destino nos unió.
N.T. Estos dibujos han sido realizados en la oscuridad de la noche con la simple luz de la pantalla de un ordenador, de ahí que sus trazos no sean todo lo precisos que cabria de esperar. Gracias.